Los mitos, esa grandiosa creación de la mitología griega, por otra parte creadores del pensamiento, son profundos y pueden explicar lo inexplicable. En primer lugar ¿qué es un mito?. La palabra tiene varias acepciones, desde lo inalcanzable a una simple mentira o ciertas creencias que con el tiempo dejan de ser enigmáticas, por ejemplo los mitos urbanos. Pero vamos a la mejor definición que he encontrado con Scott Peack: Desde la edad media, los monjes cristianos, mahometanos y budistas coinciden en que la figura que representa mejor por su significado sobre el mito es el dragón. Animal mitológico, creación de la mente humana, que mejor se parece al hombre, porque se arrastra como una serpiente pero puede volar como los cóndores. Así somos, reptamos porque somos denigrantes y volamos porque somos sublimes.
Se me ocurre una pintura ideal es EL QUIJOTE DE LA MANCHA, LAS AVENTURAS DE ALONSO QUIJANO, cuando el caballero por su imaginación es el cóndor y por lo terrenal lo observamos a Sancho Panza. Ahora hablemos de un mito que se convierte en complejo, el de Edipo. Edipo se enamora de Yocasta quien está casada con Layo rey de Tebas. Este rey había violado a una mujer y los dioses lo condenan al presagio: «tu hijo te matará». Edipo se casa con Yocasta sin saber que era su madre y lo mata al padre. Tienen una hija, Antígona. Al enterarse Edipo que se ha involucrado sentimentalmente con su madre decide pincharse con un alfiler ambos ojos y se queda ciego.
Muchas interpretaciones podemos sacar de este mito, pero la que prevalece, es ya bajando al plano de la psicología, cómo hijos y madres se enamoran, en el caso del hijo con la madre es el complejo de Edipo y el del padre con la hija es Electra. Hablemos de este sentimiento, enamoramiento, afecto especial entre la madre y el hijo. Se presenta en determinados casos y en diferentes niveles. La madre que finge estar enferma o insiste que el hijo está enfermo para que no vaya a la escuela y se quede con ella. La mamá que sobre protege al nene, le da todos los gustos, trata de preservarlo de todas las contrariedades que tiene la vida, y hasta miento al padre cuando el hijo se manda una macana, desde niños a joven, inclusive en la alta madurez. El daño es enorme, porque el niño se vuelve inbécil, im con, becil báculo..bastón…es el hijo que para vivir tiene de bastón se apoya en él que es la madre. La madre termina viviendo por él y cuando la mamá no está porque se muere o por diferentes motivos, el hijo pasa a ser un formidable desgraciado.
No puede valerse por si mismo, su madre ya no estará más con él y concuerda con la explicación de Edipo cuando se pincha los ojos, porque en realidad el hijo al perder a quien le hacía la vida más fácil, ahora está ciego ante las realidades fatídicas del mundo. No hace falta describir el solterón con la mamá, el que no se banca las discusiones con su esposa y se raja siempre a la panza de su madre, es como si volviera a meterse ahí donde el regazo de la vida era comodidad, placer, calentito, y dice que no quería nacer.
Qué vemos en la actualidad?. Que el Edipo es una pandemia palabreja de moda, universal, porque las madres al sobreproteger descuidan a sus hijos no los dejan crecer y todos caen en una especie de peterpanismo, Peter Pan, el niño que no quería crecer en la tierra del nunca jamás. Este niño a quien metafóricamente la madre le pincha los ojos, hace sus diabluras, la madre le echa la culpa a la maestra, cuantas madres recordemos pasaba el tiempo y el niño crecía llegaba a la pubertad, se asomaba a la adolescencia y de noche en punta de pies se acercaba a la cama de la chica, que le llamaban sirvienta y que habían traido del campo a trabajar. El joven la ultraja, la abusa por las buenas o por las malas y la termina embarazando. La madre se entera, la panza de la «sirvienta» crecía, la lleva a la estación, le pone unos mangos en el bolsillo y la manda de vuelta a sus pagos. Esa madre le esta pinchando los ojos a su hijo.
Tiempo de Edipos, de madres ausentes, de madres que quieren compensar con cosas, que no son las cosas del querer como la película sino las cosas del tener o el querer de las cosas, el padre se hace el boludo y se justifica diciendo: si yo estoy muerto, a mi nunca me dieron bola, y ya joven Edipo no tiene voluntad, cambio setecientas veces la carrera para no ser nada, es manguero, tiene en la era tecnotrónica todas las maquinas funcionando para el, tiene sexo para tirar hacia arriba, de cualquier genero, se emborracha, toma droga a veces y muere y mata, y mata a los padres de los hijos muertos como en el caso de los rugbier, que todavía no empieza el juicio, si tienen plata pagan los mejores abogados pero todo empezó porque la madre no le enseño sobre las asimetrías..respetar a los mayores, estar el tiempo necesario con ellos, amarlos y jamas mentirles, ir a la escuela y adelante de todos traerlo de una oreja si se manda una macana, enseñarle a ser hombre. Para que cuando lo necesite sepa seducir a una mujer y no abusarla menos violarla ni matarla.
Jovenes sin historia, porque no conocen la historia, sin voluntad porque siempre habrá alguien que le haga los mandados, son boca sucias, no acarician, desgarran, son quejosos, no se la bancan, no prestan atención, nunca miran a los ojos porque sus ojos estan metidos en un celular, no estudian no leen, no tienen ideas, no conocen de actividad cívica, no leyeron la constitución creen que en la vida es hacer lo que uno quiere y no querer en lo que uno hace, un desastre!!!. La generación de las generaciones de hombres y mujeres débiles y se juntan en grupos y el grupo chupa, absorbe.
Jamás entenderan que deben desarrollar el espiritu, el fisico y la mente. Este tríptico no pasa por sus vidas, no abren los ojos en la madrugada para ver el aurora o directamente creen ver el arcoiris pero porque están en pedo.
Ebriedad fáustica, vivir por vivir y porque todavía no se han muerto. Cuando se les muere la mamá son terribles desgraciados o se mueren con ella o quedan medio vivos y medio muertos. No afrontan jamás una responsabilidad, no entienden de códigos ni valores si pueden se van del país y nunca devuelven…jamas devuelven nada porque están vacíos y se convierten en LAYO el padre que mataron quien vuelve en el tren que Yocasta envio de vuelta a la chica que estaba preñada, en el mismo tren, LAYO atropellará y matará a Edipo en una sociedad…donde todos vivimos muriendo sin morir del todo: nuestra condena mayor. ¡Nene usá condón porque ya gasté mucha plata en tus abortos!. Un día Edipo recupera la vista, observa el tendal que ha dejado a su paso y se vuelve a pinchar los ojos.
JC MALIS.
Y ?….y que desde niños para ser hombres, es por el merito de lo que nos hacen faltar y no sobrar, es ahí cuando comprendemos el valor del sacrificio, de lo contrario nos transformamos en nuestra caricatura.