INFIDENCIAS DE CAMPAÑA.
Hace unos días estuve con un alto referente de Juntos por el Cambio y que viene siendo coincidente desde hace tiempo con las ideas que profesa el diputado nacional Ricardo Lopez Murphy. Inclusive pude verlos juntos hace uno par de años con el ex presidente de la UCR – fallecido Antonio “Nito” Falcón en el club Sirio Libanes, oportunidad que le entregué un ejemplar del libro Los Perseguidos y me lo agradeció porque en Buenos Aires ya le había leido el prólogo. Lo cierto que este dirigente sanjuanino a quien protejo la fuente me dijo que Ricardo piensa venir a la provincia de San Juan para armar una nueva línea opositora siempre en consonancia con Juntos por el Cambio, ya que deja el profesorado y se va a dedicar absolutamente a la política.
Me dijo, se lo dice a un periodista, cuyos principales depositarios son los lectores, la sociedad, que le preocupaba sobremanera el nivel que ha visto en este corto tiempo, de su par Marcelo Orrego. Le pregunté, quise averiguar a fondo qué le cuestiona y me contestó que observa falta de iniciativas, ideas y que en realidad no lo ve capacitado a Orrego para conducir los destinos de esta provincia en caso de que ganaran las elecciones el próximo año. Obviamente ya sabemos que una vez que Lopez Murphy visite la provincia sobre este tema tan picante no va a reconocer esta preocupacion que puede dividir y no sumar de todas maneras, coincido en referencia al diputado Orrego que va a tener que cambiar sus formas, oratoria, convicción y si se puede mejorar el carisma de una persona que lo haga porque está faltando el tacto, el contacto que tienen los dirigentes sobre la gente. No nos olvidemos de Schopenhauer: “entre las principales características de la condición humana figura la la afectividad, somos afectivos por naturaleza”. Yo le pude observar esta condición connatural en la figura de Carlos Menen, sabía que un abrazo eran votos definitivos y rompía cualquier protocolo.
De todas maneras es importante saber que se puede hacer en este caso para las aspiraciones de Orrego si es que realmente quiere ser gobernador porque hasta ahora en la Cámara de diputados, no ha demostrado el fervor y el ideario fundamental para ratificar sus ambiciones. Salvo una infidencia técnica de los micrófonos donde echó de su grupo a una persona sin contemplaciones, no se le recuerda ninguna participación donde muestre sus bríos. Tampoco seguramente le están pidiendo que tenga la oratoria del Indio Colombo, que lo hizo callar a Alvaro Alsogaray en plena Cámara de diputados, pero algunas cosas deberá aprender porque se observa con esta confidencia que me hizo el militante que ya le han puesto la ficha desde la Nación.
Tampoco la gente quiere, números que hablan como Don Roberto Basualdo, quiere números de carne y hueso y no la INDIFERENCIA DE LAS ESTATUAS MOJADAS POR LA LLUVIA.
JUAN CARLOS MALIS.